En educación no hay tarea pequeña
Que un tercio de la
población nacional, es decir 35 millones de alumnos que conforman el sistema
educativo mexicano, este en las escuelas es una labor titánica que se logra con
el trabajo de mucha gente.
De ese total, casi 30
millones lo hacen en escuelas públicas, y la magia de la enseñanza empieza
cuando se abren las puertas de cada plantel educativo. Y para que ello sea una
realidad cientos de miles de trabajadores de la enseñanza ya empezaron a
trabajar, cuando alumno, maestro y director llegan, ya están los salones
limpios, pupitres acomodados, pizarrón preparado, todo está en su lugar.
El pasado martes 28 de enero,
quien escribe esta columna tuvo el privilegio de que las ideas de TEXTUAL-es
fueran escuchadas por cientos de trabajadores de la educación, quienes tuvieron
la oportunidad de preguntar y exponer sus inquietudes.
Los trabajadores de la
Sección 11 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE),
encabezados por su secretario general, Gabriel Corchado Acevedo, me recibieron
con amabilidad y escucharon con atención los planteamientos de las columnas que
se leen cada semana en este espacio.
A todos ellos les agradezco
la oportunidad que me dieron para plantear mis ideas, y compartir inquietudes,
luego de que les subrayé que en educación no hay tarea pequeña, y que en el
proceso de la enseñanza es tan importante la persona que nos abre la puerta de
los planteles educativos, como el Secretario de Educación Pública, porque todas
en su conjunto harán posible la maravilla de la educación pública de calidad.
En la plática planteamos que
la educación pública en México es de vital importancia, porque como decían las
abuelas: “la educación es lo único que le dejamos a nuestros hijos”, además es
palanca de desarrollo de las naciones.
En la actualidad el reto ya
no es sólo la cobertura, es decir atender la demanda, ahora se requiere que sea
de calidad.
El crecimiento del país está
ligado al nivel educativo de la población, por lo que es una sinrazón no contar
con acciones serias y decididas en el sector, que ha padecido ocurrencias
sexenales, así como programas y planes alejados de la realidad que se vive en
las escuelas.
Un año más de educación
promedio en un país incrementa la tasa de crecimiento del Producto Interno
Bruto (PIB) en 0.6 por ciento; y un año adicional de escolaridad en una persona
incrementa su ingreso en 20.8 por ciento de por vida.
Con base en estas cifras y
apuntes en estudios internacionales, es urgente crear una política de Estado en
materia educativa que vaya más allá de los sexenios y vaivenes políticos, y
hacer de la enseñanza la plataforma de crecimiento de la nación.
Textualmente
hay que decirlo: Como planteó el filósofo español Fernando
Savater: “La educación no es un gasto sino una inversión que hace la sociedad
para su futuro y, no efectuarla, le implicará un costo más caro a los países”.
Premio Nacional de
Periodismo 2005, otorgado por el Club de
Periodistas de México, en la categoría de Divulgación de la Educación, Ciencia
y Tecnología.
Twitter: @Villasana10
No hay comentarios:
Publicar un comentario