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Vamos
a respetarnos
Habrá que llevar el análisis y
el debate surgido del movimiento #MeeToo al más profundo origen del problema,
que es la violencia y la pérdida de valores como sociedad. Al leer algunos
mensajes en la red hay que notar que también existe acoso de hombre contra
hombre y mujer contra mujer, entonces no es un problema de género.
Hay que retomar los valores
que nos distinguieron como sociedad y respetarnos. Claro que hay una
desigualdad de condición entre los géneros en México, la cual debemos
solucionar entre todos como sociedad. Pero hay que resolver lo general para
luego hacerlo con lo particular.
Las mujeres mexicanas son las
que más trabajan en todo este continente, ya lo he dicho en este espacio, a la
semana, laboran 74.4 horas, 50 de ellas las destinan en trabajos no remunerados
como el cuidado del hogar y de personas, como lo citó recientemente la
especialista de Programas en ONU Mujeres México, Juliette Bonnafé.
Además, de todo lo que
representa para la economía nacional, una parte de ellas sufre violencia en sus
áreas académicas, laborales o en la calle, lo cual es reprobable, porque se
perdió el respeto, y ahora, ante el panorama actual, como sociedad hay que
sensibilizarnos, hay que respetarnos.
Tenemos ante nosotros un tema
de violencia, en el entendido de que hay grupos más vulnerables que otros. Hay
un tema de educación, de la que se aprende en casa; porque el respeto se
aprende en el seno del hogar.
El país cambio mucho desde que
le dejamos la educación de nuestros hijos a la televisión y luego a los
videojuegos, en ambos casos vean los contenidos y la temática.
Hay que cambiar la cultura y
los estereotipos, se trata de modificar unas mentalidades y crear nuevas en las
futuras generaciones.
Necesitamos políticas de
cuidados y protección social e incidencias escolares, con el apoyo de las
tecnología y redes sociales, claro, estamos en el siglo XXI.
Textualmente
hay que decirlo: ¿dónde nos perdimos? ¿En qué lugar quedó el
México de antaño? Aún recuerdo a una persona que pintaba canas le decíamos señora/señor,
le cedíamos el asiento a las mujeres, que junto con los niños era lo primero.
Con todo respeto, hay que retomar lo mejor de ese México, con los mejor del
actual para convivir. Empecemos por respetarnos.
En Twitter @TXTUALes y en Instagram
@villasana10
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